Según el Sintoísmo, cualquier elemento natural contiene un espíritu propio que debe ser respetado, además también se cree que cualquier objeto puede ser objetivo de posesión por los entes del más allá que se quedaron rezagados en el mundo terrenal.
Todo eso lo sé ahora que me han crecido pelos en zonas molestas y me he ido planteando cosas más serias, pero cuando era más nano no me resultaba extraño ver tal cantidad de elementos inanimados con propiedades humanas en la saga de 'Banjo-Kazooie', y ver como te observaban con esos enormes ojazos amistosos... malrolling intensifies.
No deberíamos darle más importancia de la que aparentemente tiene, no creo que el trasfondo que le quisiesen dar fuera a lo 'Toy Story'. Es un juego de fantasía (casi una fábula) con el folklórico detalle de que hay retretes que te cuentan sus malas digestiones, libros antiguos que adoctrinan mejor que el mejor de los brujos o sopletes cegatos malhumorados abandonados a su suerte.
Pero ¿y si no fuese así?¿y si hay un aspecto animista oculto en la saga de Rareware?
Este cómic comparte mi perturbación personal por este caso.
[!] Una vez que te haces al extraño y alegórico mundo este en el que vive el oso meloso y el breegull no te resulta tan experpéntico, incluso a algunos nos enternece. Siempre podía ser peor, ver a tus heces conversar sobre el tiempo no debe ser nada sano para la mente.
Y ya si pasa como en Sausage Party... arrítmia asegurada. Id a admirar la peli ya mismo!
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