Un erizo en el casino

La experiencia me ha demostrado que los erizos, y especialmente los que son azules, son extremadamente adictos al juego. No se sabe si es por el destello incontrolado de bombillas parpadeantes, el melodioso sonido de la bola en la ruleta, las monedas callendo en la bandeja o que ese ambientillo repleto de bichos androides intentando matarte y la rebotante sensación de los bumpers en tu cuerpo hacen del casino la zona preferida para Sonic.

...lástima que se le dé tan mal el apostar... nunca terminéis como la mascota de Sega, chavales. Seguid jugando al GTA que es menos nocivo para la salud xD